domingo, 1 de junio de 2008

Todo el día es poco tiempo para verte, ojos.

Sábete una cosa: no me importa tu ausencia de tantos años en mi vida. No, no. Y no me importa que no estés conmigo cuando sea tan anciana que se me olvide tu cara.

Es que, dime una cosa ¿de qué sirve cortar al tiempo en años? El tiempo no es más divisible que mi pensamiento... vivo ahora y mañana, mañana y ayer. Y todo es lo mismo. Y todo al mismo tiempo.

Lo único de lo que puedo estar segura es de tu cabello de mar entre mis manitas frías


Todo lo que quiero es tenerte aquí, ahorita.

Y te tengo.

Así como eres, así como estás.

Encerradito en la pantalla coral de mis párpados dormidos.

Frotándote los ojos con la insistencia de quien se rehúsa a ver lo cotidiano como tal.

Hundido en la plenitud de tus ideas, ésas que me hicieron descubrirte. Y amarte.

Amarillo, jaune, yellow, giallo.


Así... justamente así.

1 comentario:

José Pulido dijo...

El amor, el amor. jejejeje yo tampoco porque hay que cortar el tiempo